En el momento actual aparentemente es fácil la comunicación entre personas por diferentes mecanismos.
Sin embargo aun sigue habiendo personas, sobre todo mayores, que se encuentran solos y aislados socialmente.
La falta de ayudas sociales, las barreras arquitectónicas y las propias circunstancias personales favorecen esta situación.
La posibilidad de acudir a un centro de día o un centro residencial con actividades de animación, terapia ocupacional y actividad física abre las puertas a mejorar la socialización de cualquier persona con este déficit.
Por otra parte la existencia de la tele-asistencia puede mejorar esa sensación de aislamiento a la vez que se pueden resolver problemas y dudas que surgen en el día a día de una persona que vive sola.