La diabetes es una enfermedad especialmente prevalente en las personas mayores. Sus consecuencias pueden menoscabar la salud de forma importante.
En su control son sumamente importantes las medidas dietéticas, el ejercicio y el tratamiento farmacológico.
Desde los centros asistenciales se realizan controles periódicos de azúcar con el fin de detectar nuevos casos.
Por otro lado, las personas diagnosticadas, precisan la intervención del equipo multidisciplinar, ( Médico, enfermera, dietista, podólogo y fisioterapeuta) con el fin de llevar un buen control de la enfermedad y evitar sus complicaciones.