La terapia de Reminiscencia consiste en pensar o hablar sobre la propia experiencia vital a fin de compartir recuerdos y reflexionar sobre el pasado. Las experiencias y los recuerdos compartidos en grupo, constituyen en el medio residencial, un buen medio para alentar y apoyar la interacción social y el entretenimiento.
Recordar el pasado refuerza la propia identidad, contribuye a dar un sentido de continuidad y coherencia a la propia vida, ayuda a la aceptación de las vivencias dolorosas del pasado, permite traspasar información y experiencias entre generaciones y favorece la creación y el mantenimiento de vínculos sociales.
Intervenciones
Tertulias para revivir
El objetivo es estimular a los participantes para que recuerden y compartan con el grupo aquellos hechos personales y significativos en sus vidas. Para estimular el recuerdo, es aconsejable utilizar objetos o materiales lo más sensitivos posible: materiales audiovisuales, aromáticos, musicales, táctiles, comestibles, manuales, etc.
Creación de una historia de vida
Consiste en crear junto a la persona una pequeña autobiografía ilustrada manual que recoja las etapas más importantes de su vida, y que constituirá posteriormente un instrumento muy importante para conservar la memoria y la propia identidad.
Objeto reminiscente
Con esta actividad vamos a crear o fabricar un objeto original y personalizado que simbolice para la persona algo significativo y que le llame la atención por sus cinco sentidos. Por ejemplo, una casa de muñecas, un mueble en miniatura, un muñeco, un vehículo, etc.
Recorrido histórico-temático
Se trata de ir recopilando una serie de acontecimientos históricos, musicales, artísticos, deportivos, etc. paralelos a hechos de la propia vida de la persona. Para ello se pueden utilizar periódicos antiguos, libros de historia, visionado de reportajes de la época, etc.