Consejos para sobrellevar las altas temperaturas con la llegada del verano
Ha comenzado el verano. Las altas temperaturas y las olas de calor empiezan a notarse en el ambiente, con los termómetros marcando temperaturas superiores a los 30 grados en Madrid. Empieza una de las estaciones del año más peligrosas para las personas mayores ya que estas son las más vulnerables a la hora de sufrir golpes de calor. En Los Nogales, residencias para gente mayor, nos preocupamos por el bienestar de las personas de mayor edad por eso, queremos hacer hincapié en las recomendaciones de los equipos sociosanitarios para que nuestros mayores se sientan mejor en esta época del año y no sufran consecuencias en su salud.
- La primera recomendación es beber líquidos (preferiblemente agua) frecuentemente, aunque no se tenga sed ni se realice alguna actividad física. Pero hay una serie de excepciones. No se debe realizar un consumo excesivo de bebidas alcohólicas, cafeína o aquellas que tengan grandes cantidades de azúcar.
- Realizar comidas ligeras, que ayuden a la hidratación y que no provoquen digestiones pesadas. Asimismo, se recomienda ingerir, por ejemplo, ensaladas, frutas y verduras.
- Evitar la exposición al sol en las horas centrales del día, que son de 12:00 a 17.00.
- Usar ropa ligera, holgada, transpirable y accesorios que protejan del sol, tales como gafas o gorros.
- Mantener las habitaciones ventiladas y climatizadas. La temperatura recomendable es de 24 o 25 grados, la cual se mantiene continuamente en las residencias Los Nogales independientemente del calor que haga fuera.
Altas temperaturas y mascarillas
Pero a las preocupaciones habituales de cada verano, este año se suma otra: el uso de las mascarillas con las altas temperaturas.
Hay tipos de mascarillas que dificultan la respiración. No es el caso de las mascarillas quirúrgicas, por lo que se recomienda el uso de estas últimas. Por lo tanto, hay que huir de aquellas fabricadas con poliéster o cualquier otro material sintético que no sea 100% algodón.
También hay que procurar no ajustarla demasiado a la cara. Es decir, tratar de que la mascarilla quede un poco holgada pero sin que pierda su sujeción en la nariz y la barbilla.
La otra recomendación para convivir pacíficamente con la mascarilla este verano es cambiarla cuando esté humedecida por el sudor. Y es que ese sudor puede atraer gérmenes y provocar irritaciones y molestias en la piel.
Para esto último, conviene utilizar cremas hidratantes que eviten las irritaciones y demás problemas derivados de los roces y el sudor. Y no olvidarse tampoco de la crema solar, ya que las mascarillas no protegen al 100% del sol.
En definitiva, es importante seguir estos consejos durante el verano y más este año, el cual se prevé que sea más el más caluroso y seco de los últimos 5 años.