Entrevista a Marlene Pérez – Día Mundial de la farmacia.
Marlene Pérez Arteaga ha sido gerocultora en Puerta de Hierro durante casi 20 años. Desde el pasado abril, Marlene es auxiliar de farmacia en Imperial. Así, con motivo del Día Mundial de la Farmacia celebramos con nuestra protagonista la importancia de este ámbito en nuestra compañía y nos cuenta como ha sido el cambio de área laboral en Los Nogales.
«Gracias a la colaboración con el equipo de enfermería, mantenemos la atención en los mayores en todo momento.»
¿Cuáles son las funciones principales del equipo de farmacia en los centros?
Desde nuestro equipo nos encargamos de preparar todos los medicamentos de los residentes en los cajetines correspondientes. Nuestra labor es colocar en el lugar adecuado los tratamientos de cada persona, organizar sus medicamentos y supervisar todos los detalles que están relacionados con los productos como: la fecha de caducidad, los etiquetados o la óptima distribución de los pedidos.
Además, también debemos ocuparnos del seguimiento diario del reporte de medición y de realizar los encargos para que todas las necesidades que dependen de nuestro departamento estén satisfactoriamente cubiertas.
¿Como contribuís desde el equipo de farmacia al bienestar de los mayores?
Lo cierto es que con el cumplimiento de cada función aportamos de diferente modo a su bienestar. En concreto, en el área de farmacia lo hacemos con la correcta administración de los medicamentos, el orden y control de sus necesidades médicas, y la actualización continua de los tratamientos. Pero, esto es gracias a la colaboración con el equipo de enfermería quien nos ayuda a mantener la atención en los mayores en todo momento.
¿Cuáles son los principales desafíos que afrontas como profesional sociosanitario?
Creo que eso depende de cada persona. Para mí, creo que los primeros retos que debí superar fue la agilidad en este área, la eficiencia y la optimización del tiempo para poder hacer más cosas. También destaco la importancia de realizar los pedidos y tener controlados todos los pequeños detalles que están relacionados con los medicamentos.
¿Por qué decidiste unirte al equipo de farmacia?
No sé si me atrevería a decir que es algo vocacional, pero si es cierto que siempre estuve interesada en el ámbito de la farmacia. De hecho, hace años colaboraba con estos equipos, algo que me ha permitido adaptarme con mayor rapidez. No obstante, debido a exigencias con las titulaciones tuve que dejar de hacerlo y, desde ese momento, tuve claro que quería adentrarme en este sector. Por ello, comencé a estudiar para poder ser técnico de farmacia.
¿Has sentido colaboración y facilidades por parte de los compañeros durante este proceso de promoción interna?
Sí, los compañeros han sido fundamentales en este cambio. Para empezar, fue una compañera del centro de Imperial la que me informó de que estaban buscando a un profesional en el equipo de farmacia. Gracias a eso, iniciamos los procedimientos y ahora estoy muy contenta y satisfecha de haber dado este paso en mi trayectoria profesional.
¿Qué le recomendarías a alguien que tiene dudas sobre cambiar de área laboral?
A cualquier persona que quiera un cambio laboral yo le animaría a que haga todo lo posible para lograrlo. Aunque sepa que es complicado, que sea valiente y se esfuerce al máximo para conseguirlo. Además, le diría que debe ser muy paciente porque se trata de un proceso largo y hay que estar abierto a aprender cosas nuevas.
Es importante que sea consciente de que empezar siempre es difícil porque hay cosas que desconoces o que estabas habituado a hacerlas de otra manera. Por ello, creo que la paciencia es algo fundamental hasta que te familiarizas con las nuevas funciones. También resaltaría la importancia de mantenerse actualizado en todo momento, porque a veces las herramientas y los procedimientos cambian incluso antes de darnos cuenta.