Lácteos y personas mayores: ¿Qué proporción diaria que deben ingerir?
Los lácteos son uno de los alimentos básicos, desde el punto de vista nutricional, para la dieta de todas las personas, y más en aquellas mayores de 50 años, ya que contienen importantes nutrientes. En Los Nogales nos preocupamos por la salud de nuestros mayores, por lo que queremos explicar por qué es importante la ingesta de estos alimentos y cuántas raciones al día deben tomar.
Lo primero es que los lácteos aportan entre el 60 y el 75% del calcio total recomendado, sus proteínas ayudan a aumentar la densidad ósea, reduce los niveles de presión arterial y mantiene los niveles adecuados de colesterol en sangre. Además, son apetecibles y de fácil consumo y mastificación.
Pero llegado este momento la pregunta es, ¿cuál es la cantidad recomendada de lácteos diaria? Los expertos recomiendan ingerir entre 1.000 y 1.200 mg diarios de calcio. Es decir, entre tres y cuatro raciones de alimentos ricos en este nutriente al día. ¿Cómo puede hacerse? Tomando un vaso de leche en el desayuno, un par de yogures a lo largo del día y un trozo de queso fresco en la cena.
Esta es una opción, pero por suerte hay otros muchos alimentos lácteos y no lácteos (las almendras, las sardinas o las verduras de hoja verde) que también tienen un alto componente de calcio y que se pueden combinar perfectamente para seguir una dieta sana y equilibrada.
Los lácteos en las mujeres
Pero si los lácteos son importantes para la salud de todas las personas, especialmente las mayores, más lo son para las mujeres. ¿Por qué? Por la pérdida de masa ósea debido a los cambios hormonales que se dan en su vida adulta y la llegada de la menopausia.
Cuando se acerca la menopausia o se ha llegado a ese punto de la vida, la necesidad de ingerir alimentos ricos en calcio es mayor. Y es que si para una persona que todavía no ha llegado a esta edad la necesidad de calcio ronda los 800 mg al día, cuando aparece ese cambio hormonal se recomienda una ingesta de 1.200 mg.
Así que si todavía no incluye los lácteos (o cualquier otro alimento rico en calcio) en su dieta diaria, empiece a hacerlo. Su cuerpo lo notará a corto y, más todavía, a largo plazo, cuando empieza a aparecer la pérdida de densidad ósea motivada por la edad. Y es que comer bien es una renta vitalicia.