La alimentación en ancianos con demencia
Muchas personas mayores que actualmente viven en residencias en Madrid tienen algún tipo de trastorno cognitivo relacionado con la demencia. En ese sentido, siendo enfermedades en la mayor parte de los casos degenerativas y sin tratamiento, es vital cuidar cada detalle de su día a día para que la enfermedad les permita disfrutar de la máxima calidad de vida posible.
La alimentación en ancianos con demencia: las claves
La alimentación en ancianos con demencia debe cuidarse con mayor ahínco que la de las personas mayores sanas. Esto es así porque sus necesidades calóricas, así como las proteínas se incrementan. Además, algunos estudios afirman que hasta un 50% de la población de este grupo sufre algún tipo de desnutrición. Solo algunas residencias madrid ofrecen en planes específicos que permiten garantizar una nutrición completa y adecuada para estas personas.
Si el paciente tiene problemas para masticar hay que garantizar la ingesta nutritiva apostando por trocitos muy pequeños o por alimentos triturados que tengan una textura sin grumos y suave.
Es fundamental establecer rutinas fijas y tener paciencia al administrar los alimentos.
Para estas personas mayores que sufren demencia los profesionales recomiendan el incremento del número de comidas -hasta 6- y adaptarlas a los propios gustos de la persona para mejorar sus ganas de comer.
Hay que apostar siempre por una dieta variada en la que se incluyan cereales, ensaladas, hortalizas, legumbres, lácteos, pescado en mayor medida que carne, huevos y frutas.
Ejemplo de menú saludable para ancianos con demencia
Casi siempre los ejemplos son más clarificadores que la teoría. Así, una idea de menú saludable para ancianos que tienen enfermedades relacionadas con la demencia podría incluir: un alimento basado en los cereales como la pasta o el arroz o uno del grupo de las legumbres. Otro de esos alimentos de la comida debería ser una verdura, bien cruda o cocida. Al mismo tiempo, habría que incorporar una proteína, que puede ser pescado, huevo o carne. Se recomienda finalizar con una fruta o yogur, o incluso ambos.
Si te ha gustado descubrir algunos de los consejos para mejorar la alimentación en ancianos con demencia puede que te interese descubrir algunas residencias para ancianos en la capital que apuestan por estas buenas prácticas en su servicio.