Cómo evitar la pérdida de masa muscular en las personas mayores
Que los centros geriátricos Los Nogales ocupen las primeras posiciones en el ranking de residencias de ancianos en Madrid, se debe, en gran parte, al completo cuidado de la salud que ofrecemos a los mayores, tanto desde el punto de vista preventivo como en la recuperación de aquellas lesiones o intervenciones quirúrgicas a las que hayan tenido que someterse. Muchas de estas operaciones, requieren periodos de inmovilidad que, unidos a la ya de por sí mermada actividad física de estas personas, dan lugar a una preocupante pérdida de masa muscular que hay que combatir con ejercicios específicos.Le contamos un poco más al respecto en este artículo.
La sarcopenia
Pocas personas conocen este término acuñado por Irwin Rosenberg en el año 1989 y que hace referencia a la pérdida de masa y potencia muscular que tiene lugar durante el envejecimiento. Se trata de una pérdida que afecta a todas las personas, por muy activas que hayan llegado a su edad. Por lo tanto, el objetivo es retrasar esta pérdida todo lo posible y evitar que tenga grandes consecuencias en el estado físico general.
Según los estudios realizados al respecto, la masa muscular comienza a disminuir de manera gradual sobre un 5%-8% por década a partir de los 30 años. De todas formas, este proceso se acelera tras cumplir los 60, produciéndose pérdidas de masa muscular mayores y en menor tiempo (aunque siempre condicionadas por la genética y el nivel de movilidad e independencia que tenga una persona mayor).
Consecuencias
El principal problema de la sarcopenia es que incrementa el riesgo de caídas y fracturas, lo que hace que muchas personas mayores terminen hospitalizadas, con la consiguiente mayor pérdida de masa muscular que trae consigo el periodo de recuperación y reposo al que se ven abocadas. Es más, las complicaciones derivadas de una mala caída, constituyen la sexta causa de fallecimiento entre los ancianos, de ahí la importancia de cuidar los músculos que los sostienen.
Inevitablemente, la pérdida de masa muscular suele venir acompañada de un aumento del tejido adiposo, algo normal si estamos hablando de personas que cada vez queman menos calorías debido a su falta de movilidad. Y como no podía ser de otra manera, el sedentarismo y el aumento de peso constituyen el escenario más propicio para que surjan otros problemas de salud como la hipertensión, la diabetes o la obesidad, todos ellos fatales en la tercera edad.
Cómo combatirla
La combinación de ejercicios físicos con una adecuada alimentación son la mejor manera de prevenir la sarcopenia, aunque algunos fármacos basados en hormonas de crecimiento también han logrado buenos resultados.
Sin embargo, nada como la realización periódica de ejercicios físicos de resistencia, como los que realizamos en nuestras residencias de ancianos en Madrid. Se trata de un sencillo programa de ejercicios que resulta muy efectivo en poco tiempo. Repeticiones de movimientos con cierta resistencia para que los mayores trabajen sus grupos musculares, siempre de manera controlada y vigilada por el personal que los supervisa.
Y como le decíamos, estas sesiones de ejercicio tan positivas deben venir de la mano de una adecuada ingesta de proteínas en la dieta así como otros alimentos que aporten un extra de aminoácidos para que el riesgo de sarcopenia se vea limitado al máximo.
En las residencias del Grupo Los Nogales hemos apostado porque la atención médica, fisioterapéutica y nutricional vayan de la mano para conseguir, además de un mejor trabajo preventivo que retrase el envejecimiento y la mejor recuperación de aquellos residentes que hayan sufrido una enfermedad o hayan tenido que operarse.