Porque la salud también está en los pies
Son muchos los servicios médicos especializados disponibles tanto en nuestras residencias como en nuestros centros privados de día. En algunos de nuestros anteriores artículos ya le hemos hablado de muchos de ellos y hoy le toca al turno al servicio de podología del que también disfrutan nuestros mayores.
A la hora de comparar los precios de las residencias de ancianos en Madrid resulta fundamental valorar la oferta de atención sociosanitaria que ofrece cada centro. En el Grupo Los Nogales contamos con una de las propuestas más completas en las que el cuidado de la salud y la atención médica juegan un papel protagonista.
Sin duda, los pies son los grandes olvidados de nuestro cuerpo. Parece increíble que cumpliendo una función tan imprescindible como permitir nuestro desplazamiento, les prestemos tan poca atención. Con el envejecimiento y el uso continuado de calzado poco apropiado, los pies de las personas mayores tienden a sufrir cierta atrofia muscular, especialmente en el talón que condiciona el apoyo sobre el hueso calcáneo, además de una disminución de la movilidad de las articulaciones del metatarso y el tarso. Tampoco podemos olvidar que para aquellos que sufren enfermedades como la diabetes, el parkinson, la demencia, la artritis reumatoide, la osteoartrosis, la gota, las secuelas de infartos… el cuidado de los pies resulta determinante.
Nuestro servicio de podología
La podología entendida como la ciencia que estudia y trata las afecciones y patologías de los pies se ha convertido en un servicio de gran importancia en los centros del Grupo Los Nogales. Por ejemplo, son muchos los ancianos que necesitan nuestro servicio de onicocriptosis, el limado y corte de uñas para evitar que se encarnen y provoquen infecciones.
Igualmente, en nuestros centros trabajamos con profesionales que pueden facilitar calzado terapéutico para prevenir posibles problemas derivados de malas pisadas y evitar malformaciones futuras.
Para evitar la aparición de problemas dérmicos (callos, durezas y ojos de gallo), deformaciones en los dedos (juanetes, dedos martillo…) o alteraciones fisiológicas (pies planos, pies cavos, pies en varo…) nada como seguir estas prácticas que siguen los podólogos de nuestro equipo:
- Lavar bien los pies con agua y con jabón neutro.
- Masajearlos con una crema hidratante específica.
- Revisar su estado, utilizando un espejo para las plantas.
- Ante una lesión, zona enrojecida, hinchazón, dolor, adormecimiento u hormigueos, acudir a profesionales especializados.
No debemos olvidar que la salud también está en los pies y cuidarlos debe convertirse en una práctica habitual durante todo el año, pero mucho más en esta época en la que el calor puede pasarles factura tanto desde el punto de vista estético como de salud. Por eso, en Grupo Los Nogales no perdemos de vista a los pies de nuestros mayores, un servicio que se suma al resto de los que deben ser valorados a la hora de comparar los precios de residencias de ancianos en Madrid.