Técnicas de intervención alternativas en geriatría
En las residencias de ancianos en Madrid privadas como la nuestra cada vez tienen mayor cabida terapias innovadoras aplicadas al cuidado de las personas dependientes. En el siguiente post vamos a ver algunas de las más extendidas.
Los centros sociosanitarios hemos de volcarnos en cuidar la salud física y psíquica de nuestros residentes. Estando al día sobre las nuevas terapias que van surgiendo en el cuidado de estas personas. Todo para mejorar su calidad de vida, para reforzar su autonomía.
Estas terapias están enfocadas a prevenir o tratar cuestiones físicas o psíquicas que puedan causar un empeoramiento de las capacidades y habilidades de las personas, mermando su autonomía, autoestima y bienestar. De hecho, la mayor parte de las terapias clásicas se han ido reciclando e incorporando nuevas tecnologías.
Algunas de estas terapias alternativas de las que hablamos son talleres de cocina y jardinería, danza, hidroterapia, terapia asistida con animales o aromaterapia. Muchas de ellas hace tiempo que tienen presencia en Los Nogales. Es el caso de la musicoterapia ya que está probado que aumenta la interacción y la comunicación social, rompe el aislamiento y mejora la autoestima.
Musicoterapia para socializar y relajar
Como decimos, muchos estudios han demostrado los beneficios de la musicoterapia para la salud de nuestros mayores. Si se emplea bien y de la mano de profesionales, puede reducir el dolor y combatir la ansiedad. Esto le ha hecho ganarse un hueco destacado en el campo de la Geriatría y la Gerontología y cada vez más residencias como las nuestras incorporan la musicoterapia a su oferta de actividades terapéuticas.
Suelen ser sesiones grupales en las que la música es un estímulo para que las personas mayores se entretengan, socialicen y se relajen. Se consigue un aumento de la autoestima y de la comunicación con los compañeros. También es una interesante herramienta para activar la memoria, despertar las emociones e impulsar la creatividad. Les ayuda a estimular las habilidades cognitivas más deterioradas con la edad como la memoria, la atención y la concentración. También la orientación espacio-temporal y la expresión verbal.